Este 15 de agosto, la comunidad cristiana del cantón Chone vivió un emotivo homenaje junto a la hermana Margarita MC. Carthy, una religiosa que a lo largo de su vida ha entregado su tiempo, energía y bondad a la comunidad y que a pesar de sus ochenta y seis años(86), de los cuales, 64 lleva apegados a la religión y en los que ha sido ejemplo de una labor incansable.

Los últimos 24 años, su labor pastoral la ha desempeñado aquí en Chone, en la Parroquia Santa María Bernarda, lugar que un día la acogió y del que hoy, la hermana de nacionalidad Irlandesa ha decidido retirarse, alejada de su labor social pero ligada a esta ciudad y el afecto de su gente, por siempre.

Muy emocionada, Margarita MC. Carthy -misionera cristiana- expresó: "Dispuesta a ir donde Dios me mande, entre más tiempo en un lugar, mejor, contenta de lo que he hecho y en donde he podido ver personas que creen en el vecino que viene a servir, aquel que es honesto, solidario y lo más importante que recibe con amor".

Además detalló, "Lo más lindo es ver crecer a una idea, como se ve crecer a un niño… en todas partes del mundo hay lugares en donde el ser humano se puede sentir bien y Chone es uno de ellos, poblado de personas amables, montañas bellas, de ríos de aguas cristalinas y colorida vegetación, que ya forman parte de mi vida y aunque he pasado alejada de mi familia, siempre he estado rodeada de muchos amigos y eso es lo importante para mí".

Los asistentes expresaron su solidaridad con la hermana, entre frases de apoyo, expresiones de cariño y gratos recuerdo. Luego del brindis, la música y los abrazos complementaron este justo homenaje, a la fundadora de varios servicios sociales y proyectos de Chone como; Asistencia a Mujeres Sufriendo (ASMUS), Hogar de Ancianos Jacinta Polo, Centro de Desarrollo Humano Santa María Bernarda, Casa parroquial, Templo de Santa María Bernarda, Comedores y Tienda Populares.

Ricardo Macías, ciudadano de Chone, expresó: "la hermana nos deja un legado que nos ha fortalecido como comunidad católica, a través de su labor social, capacitando a la mujer en función de sus destrezas, ayudando al más necesitado, controlando a los comercios para que haya igualdad de precios; su labor es infinita”, opinó.

Carlos Urbina, ex párroco de Santa Rita, manifestó "el aspecto religioso y su entrega a Dios, de una manera sacrificada han incidido en la formación de este pueblo".